Abono verde

Visitando nuestra huerta de la Fombera, he visto como el abono verde que sembramos en un par de parcelas comienza a germinar. Aún, solo podemos ver los cotiledones (https://aprendizajebasadoenelhuertoabh.blogspot.com.es/2017/10/germinacion-de-semillas-de-lechuga.html), pero poco a poco irán saliendo las primeras hojas.

Pero, ¿qué es y para qué sirve el abono verde?

Con el nombre de "abono verde" nos referimos a una serie de cultivos de ciclo muy rápido destinados a enriquecer el contenido en nutrientes de un suelo y a activar su población microbiana. Estos cultivos suelen sembrarse en periodos en los que la tierra va a dejarse sin actividad, por lo que además de los beneficios ya citados, también protegen al suelo de la desecación, y frente a la erosión causada por agua y aire.

Son diferentes las especies empleadas como abono verde, pero yo hoy quiere destacar dos tipos de familias:

 - las leguminosas: a las que cabe destacar porque son plantas capaces de fijar nitrógeno atmosférico en el suelo- gracias a las relaciones simbióticas que establecen con microorganismos de tipo Rhizobium-. El nitrógeno es un componente importantísimo de proteínas y ácidos nucleicos (o material genético), moléculas ambas, que las plantas necesitarán fabricar si quieren crecer y producir nuevas células. Recordad, que salvo en el caso de que una planta sea carnívora, el resto de plantas obtienen su alimento exclusivamente de la fotosíntesis, y este proceso solo proporciona azúcares. De los azúcares pueden fabricarse grasas, pero para fabricar proteínas y ácidos nucleicos se necesita nitrógeno, y las plantas deben tomarlo, bien del suelo (gracias a las leguminosas), bien de abonos químicos.

Entre las leguminosas usadas como abono verde, cabe destacar: el trebol blanco, las habas y las altramuces.

 - las crucíferas: hacen un mejor aprovechamiento de los minerales del suelo gracias a la longitud de sus raíces. Acumulan estos minerales en sus partes aereas, y de ahí los devuelven al suelo. También favorecen que otras plantas puedan absorver el fósforo (P) insoluble del suelo. El P también es, entre otras cosas, un importante componente de los ácidos nucleicos.

Entre las crucíferas usadas como abono verde cabe destacar la mostaza blanca y el nabo forrajero.

Nosotros sembramos estos dos últimos y lo hicimos a voleo, de forma que las semillas quedaran bien esparcidas por todo el bancal.

Al cabo de un mes, empiezan a brotar las primeras hojas de la mostaza blanca, que como podeis observar en la foto no se parecen en nada en aspecto a las dos primeras -los cotiledones- http://bit.ly/2Aiwmkl.